El Ayurveda en mi vida, ha significado un cambio en mi forma de pensar y vivir.
Comencemos por el principio; mi primer acercamiento al Ayurveda se lo debo a mi instructor de yoga Cristóbal Grez, cuando hace 4 o 5 años atrás me regalaron 1 año completo de yoga en mi escuela de inicio “Espacio la Montaña” y me transformé en la pupila más constante de mi gurú, tanto fue así, que en más de una ocasión en invierno, nos vimos en la sala sólo él y yo, porque el frío tiende a paralizar a las personas jajaja. Fue en ese entonces, cuando me dijo - “Milenka, es momento que des un paso más y no sólo practiques Yoga sino que estudies también”, me dejo varios pdf para estudiar y aprender, y un libro que cambio mi vida se titula: “la salud perfecta” de Deepak Chopra.
Nunca imaginé como un libro me llenaría de alegrías pero además de tantas dudas y tecnicismos que no lograba entender y descifrar. No fue hasta el año 2017, que dando vuelta por mis redes sociales llegué a “@somos_india” y unas publicaciones de un curso de profundización en el Ayurveda y mi ampolleta se encendió como para iluminar una ciudad entera.
Para ese entonces de mi vida, yo estaba viviendo un cuadro depresivo importante y algo me decía dentro de mí, que debía estudiar y aferrarme de eso para sanar. Y sin saber nada de Ayurveda, sólo lo que intente entender del libro, decidí contactar a Jalile y Pablo de @somos_india para sumarme a su curso de profundización.
Sabía que era una ciencia, ligada a medicina, ligada al yoga pero por sobretodo ligado a un término que para mí lo es todo prevenir la enfermedad y buscar mantenernos en salud, dime tu misma/o que otra ciencia busca tan efectivamente estos objetivos?, yo aún no encuentro otra.
Mantenerme en salud, eso me daba vueltas y vueltas. Eso necesitaba, era una mujer sana pasando un momento crítico en mi vida, necesitaba y buscaba inconscientemente herramientas para mantenerme en equilibrio que no significaran empastillarme por períodos largos ni terapias donde no me entendían, sólo era un “cliente más”. Con esto, no digo que soy anti medicina convencional, pero sabía que sólo con la medicina convencional no lo iba a lograr sólo taparía el sol con una mano y yo necesitaba entender por qué y para qué había enfermado (sí, la depresión también es una enfermedad, aunque no hablemos de ella en lo cotidiano).
Llegué al curso en llamas, creo que llevaba semanas sin poder encontrar un sentido firme y valioso para mí, para agradecer sinceramente la vida, y decidí entregarme al 100% a lo que me fueran a entregar los días que duraba el curso. Cuando entro y lo primero que recibo es un abrazo contenedor y acogedor y una tremenda sonrisa de alguien que no me conocía, sentí que había ido a buscar bronce y había encontrado oro. Nunca en mi vida, nunca olvidaré ese tremendo abrazo que me dio la Jali ese primer día. A todo esto, para ella debe ser lo más natural de la vida, porque le nace ser así, para mí significó un consuelo y una oportunidad de ser mejor persona de lo que había sido hasta entonces. Desde ese mismo día decidí que mis saludos y abrazos debían ser más atentos y más enfocados al presente, porque sin saberlo podían estar ayudando en el proceso personal y sanador de otra persona.
Tranquilo/a que no he olvidado que esto no es mi biografía y mi historia de amistad con Jali y Pablo, pero Ayurveda para mi en gran medida son ellos, son mis grandes mentores y profesores en el tema y son la línea de estudio que he preferido seguir, mucho más guiada a lo humano, a lo cercano y a entender que nosotros somos los únicos que podemos sanarnos a nosotros mismos.
Bueno, el curso transcurrió y entendí por fin, el misterio del libro “La salud perfecta”, comprendí que Ayurveda es un conjunto de todo: hábitos de todo tipo, alimenticios, de prácticas físicas y meditativas y por supuesto un estilo de vida y no sólo algo pasajero.
Comprendí la importancia que tiene intencionar mis comidas, mis palabras, mis actos y mis pensamientos, que todo tiene una raíz, que el cuerpo siempre nos está hablando, que la ácidez no es porque sí, que el cáncer no es porque es lo que me tocaba vivir, que lo heredé de mis antepasados; sino que todo lo que vivo es parte también de mi elección. Que la genética, el adn, los hábitos, los pensamientos, el estilo de vida y todo influyen de igual manera en mi ser.
Aquí es cuando empiezas a cuestionar todo, y por qué entonces los bebes mueren, por qué se nace con una enfermedad si no tuve la oportunidad de decidir. Y bueno, para tu tranquilidad son preguntas que aún me hago a ratos, a momentos tengo la respuesta precisa, luego la olvido, a momentos no la tengo. Pero te aseguro que Ayurveda puede ayudarte a encontrar esas respuestas desde lo científico y desde lo espiritual.
Continué mi camino, “rayando un poco la papa” con el Ayurveda, compré mis porotos mung, me habían regalado mi raspador de lengua de cobre y con quien hablaba intentaba inculcarle el Ayurveda; caminaba por las calles viendo reacciones Pitta, Vata y Kapha e intentaba descubrir que me ponía en desequilibrio, cuál era el biotipo que me caracterizaba más (y bueno aún no tengo tanta claridad, me siento muy tridóshica gran parte del año, depende de cómo he amanecido quien me domina), descubrí que en Chile habían un par de escuelas que ya sabían de esto; y yo que sentía que estaba descubriendo algo único jajaja.
Como sé que los estudios siempre me cuestan un poco y debo dedicarles el doble de tiempo que un ser normal, en ese momento estaba terminando mi magíster, por lo que, no era opción estar en mi tesis y al mismo tiempo iniciándome en un estudio nuevo que requiere por cierto BASTANTE memoria y tener esa facultad de conectar muchas ideas al mismo tiempo. No era el momento para mí. Debía ser responsable y digerir un buen tiempo lo que me habían entregado mis amigos de @somos_india.
Casi un año después, sí como en Octubre del 2018, con otra escuela en Chile, tomé mi curso de Coach Nutricional (ayurvédico obviamente), aprendí muchísimo más, mucho, amaba ir a clases los jueves por las tardes, ver a toda esa gente interesada en lo mismo que yo y con hambre de saber más, pero no logré conectar con la escuela y me decepcioné de lo que tanto había amado en un principio que se llama Medicina Ayurvédica.
Pero como soy estudiosa y me cuesta, decidí tomar todos mis apuntes, mis videos, mis audios, todo lo del curso de coach y retomarlos de nuevo durante todo el 2019, y todo lo que no había podido conectar en un principio empezó a tomar forma con el tiempo. Así empecé a complementar mis terapias de reiki y auriculoterapia con tips ayurvédicos generales que a todos nos vienen bien y que aún no entiendo porque no se enseñan en los colegios (trabajaré para lograr eso). Me ha resultado fantástica esta mezcla.
Mis amigos de @somos_india este año vuelven a Chile (2020) y mi intensión era seguir profundizando con ellos en su diplomado, sobretodo la parte más práctica porque lo teórico uno ya lo tiene o se encuentra con mayor facilidad, pero lo práctico es necesario para mí ser guiado en un comienzo por personas que llevan más tiempo en el rubro. Bueno con el covid-19 y lo que ha ido dejando la crisis social, decidí dolorosamente dejar pendiente este nuevo avance en esto, para guardar un poco de dinero en caso de que vengan las vacas flacas (que es muy probable).
Pero les aseguro, que nada cambia en mi vida, es un estudio permanente, tomo pequeños cursos para repasar una y otra vez; los chicos me molestan con que todo lo que dirán ya lo sé, pero lo que no saben es que mi memoria es muy frágil y necesito que me repitan y recuerden las cosas seguidamente para después poder yo misma hacer mis propios análisis y conexiones.
Bueno con todo esto, muchas personas en mi entorno no entendían de que hablaba, así que a mi pareja lo invité a una charla que dieron los chicos de @somos_india el año pasado para que entendiera lo básico y me lograra seguir el hilo cuando le hablo de alguna de estas cosas. Y me atreví hacer mi primer taller de introducción al Ayurveda, reuní como a 15 o quizás un poco más de personas que me hicieron sentir cómoda y feliz de compartirles lo que yo también estaba aprendiendo hace un poco más tiempo que ellos.
Ayurveda para mí, es atreverme a tomar las riendas de mi vida, es salud, es cuerpo, mente y espíritu en su plenitud y por donde lo mire. Es la respuesta a todas mis dudas en relación a las enfermedades y dolencias del ser humano, a las enfermedades que llamamos auto-inmunes. Es un llamado a hacerme cargo de lo que quiero para mí. Ayurveda es vida y todos los días de mi vida intento transmitir lo poco que sé, del modo más similar a como me lo enseñaron: con respeto, con amor, con empatía y con un sentido de responsabilidad importantísimo.
Agradecida eternamente de mi primera escuela de Ayurveda, que a donde voy, sea el curso de lo que sea siempre hablo de ustedes @somos_india, son mi familia y no saben lo muy agradecida que estoy día a día de que aparecieran en mi camino y en el camino de todos mis cercanos, porque los conocen a todos. Gracias Jali&Pablo
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